Yo me Sumo

La educación nace en la casa y tal como nos comportemos dentro y fuera de ella refleja la manera en que fuimos enseñados. Salir a la calle y recibir muestras de mala educación no es nada agradable, ¿les ha pasado ir en busca de un servicio y la persona que se supone debe servirte cortésmente te atiende como si le pesara hacer su trabajo?


En realidad creo que a todos nos ha pasado, como cuando deseamos los buenos días pero nadie responde es como si no fueran recibidos, realmente es bastante incómodo. La ausencia de cortesía y buenos modales es un virus que ataca lentamente a la mayoría de ciudadanos y que debilita poco a poco todas las sociedades.

 Pero ¿Alguna vez nos hemos detenido a pensar? ¿En qué estamos colaborando para ocasionar este caos?, ¿somos lo suficiente pacientes para esperar nuestro turno sin soltar una queja?, ¿A quién afectamos realmente con el mal humor? 

Estas respuestas tendrían una respuesta sencilla si nos detenemos a autoevaluarnos, tomar la decisión de cambiar en pro de la tranquilidad es el primer paso para darle un giro importante a nuestros días. Optemos por cambar las quejas por tolerancia, las críticas por consejos útiles, Recordemos que “Por favor y Gracias” son palabras de poder, si nosotros cambiamos los demás lo harán también.

 La imagen de la izquierda nos muestra un Don muy preciado, me permito llamarlo así porque no todas las personas tienen la capacidad para saber dónde y cuándo utilizarlo, el silencio, es tan importante como saber hablar. Si en oportunidades hiciéramos uso de este, nos evitáramos muchos disgustos pues en ocasiones es la mejor decisión para evadir malos ratos que en su mayoría son innecesarios.

 Ser o no un buen ciudadano es elección de cada quien, Si al vestirnos nos colocáramos unos zapatos cargados de paciencia, una camisa de tolerancia y un pantalón de cortesía, cada ciudad sería un paraíso, donde los habitantes podrían salir a la calle y regresar a casa sin el estrés que agobia diariamente a todo ciudadano.

 Yo me sumo a ser un buen ciudadano ¿y tú?